Hoy, en el marco de la Campaña a Contramarcha «Ni un peque más en peligro» por iniciativa de Una Mamá de Otro Planeta, A Contramarcha y A Contramarcha salva vidas , he querido sumarme con una simple reflexión sobre el tema.
Desde que me quedé embarazada de mi hijo mayor me he dedicado a leer, aprender, averiguar, comparar y decidir sobre infinidad de cosas relacionadas con la maternidad (típica & atípica): lactancia, mobiliario, cosmética, diversidad funcional, actividades, juguetes, metodologías educativas, estilos de crianza, servicios, pediatras, porteo, sueño infantil, alimentación complementaria y familiar, fomento de la lectura y cuentos respetuosos, música infantil…
Considero que el research realizado para cada apartado ha sido profundo y definitivo a la hora de tomar un camino u otro en la crianza, pero a pesar de posicionarme en algunos de forma contundente soy flexible y respetuosa con las decisiones ajenas que se encuentran en el otro lado de la acera.
Basándome en la creencia de que cada padre y madre siempre quiere lo mejor para su bebé, entiendo que las decisiones deben ir acompañadas de una armonía familiar, de lo que sea mejor para todos en ese hogar, de lo que se puedan permitir y eso en muchos casos no coincidirá con mis circunstancias.
También creo que hay muchas familias donde las decisiones se han tomado de una forma menos consciente, por no haber averiguado, o por haber sido mal asesorados en cada campo. Tampoco soy quién para juzgarlo.
PERO…
El rol más importante que ejercemos como padres, madres, tutores de menores que tienen su vida en nuestras manos…es justamente preservarla. Y en este sentido hay algo que no se puede negociar: la seguridad.
LA SEGURIDAD. Esa es la (mi) única razón por la que hace ya 4 años y medio decidí que mi hijo (ahora hijos) iba a viajar a contramarcha el máximo tiempo posible.
En lactancia, entiendo que es infinitamente mejor la leche materna y en ello sigo. Pero también sé que (teniendo los recursos necesarios para comprar fórmula) mis hijos no morirían por beber un biberón de leche artificial.
En alimentación, soy una convencida (y hago mi máximo esfuerzo) de utilizar productos frescos, de temporada, evitar el microondas, los precocinados, el azúcar y todo tipo de pseudoalimento industrial (de esos que denuncia Julio Basulto, por ejemplo). Pero también creo que si mis hijos, de forma excepcional comiesen un bollicao, no iban a morir por eso.
Así os puedo argumentar cada decisión que he tomado. Pensando que era lo mejor a corto, medio y largo plazo en la vida de mis peques. Y entendiendo que permitir excepciones no modificará sustancialmente el beneficio en los resultados de los caminos que he elegido.
PERO…
LA SEGURIDAD no es negociable.
LA SEGURIDAD de su vida, de su supervivencia, de su posibilidad de salir ileso en un accidente de tráfico, no es negociable.
La seguridad no tiene excepciones. No podemos permitirlas. No son un caramelo en una dieta balanceada.
Porque en la seguridad vial, una excepción (-hoy no se quería poner el cinto, y como íbamos cerca…) puede ser fatal, un adiós, un nunca más.
Y por eso, LA SEGURIDAD, es la única razón que necesito para que mis hijos vayan a contramarcha. Todo lo demás es ruido, no tiene base ni fundamento, ni puede nunca competir contra esta verdad irrefutable: ir en sentido contrario a la marcha reduce en un 500% la posibilidad de lesiones mortales ante un accidente de tráfico.
Ahora, decidme si necesito una lista de 10 motivos, de 15 ventajas, de 200 genialidades…como esas tan de moda que ahora mismo escribimos en la blogosfera.
Ya os lo digo yo.
NO.
LA SEGURIDAD NO SE NEGOCIA.
Dejaríais a vuestros peques jugar al balón en un precipicio porque «así no se aburren»? Les daríais una copa de cava en navidad porque «quieren hacer lo mismo que los demás»? Ni siquiera el mareo (que no tiene fundamento, ya lo leeréis en post como éste) puede ganar en la lucha por la vida. Se marea? pues mejor mareado y vivo, no?
Hay muchísimas y muy buenas páginas donde aprender, como lo hice yo, sobre la necesidad de viajar a contramarcha. Os invito a leer, por ejemplo, acontramarcha (referencia en este tema, creada por Cristina Barroso), Laboratorio de mamá , Tigriteando.
Podéis encontrar montones de blogueros desmontando los mitos sobre ir a contramarcha, con los que coincido (y mis hijos también, por supuesto!) plenamente: Madres cabreadas, Mamá contra corriente, Mamis y bebés, entre otros.
Sobre los precios, me limito a copiar algo que leí el otro día en la página de Facebook de Kekos y que compartí inmediatamente: «un bebé no necesita un carrito, ni una cuna, ni una lámpara para la habitación a juego con la cenefa y las rayas del conjunto de edredón…
Un bebé necesita que, en caso de ir en coche, y que fuese necesario, una silla le pueda salvar la vida. Con una silla ACM el máximo tiempo posible y una buena mochila ergonómica o fular, el bebé tiene todo lo que necesita. A partir de ahí, lo demás son extras que los padres pueden sumar.» (podéis leer el texto completo aquí)
Os podéis acercar a tiendas especializadas para mirar, averiguar y probar la silla a contramarcha que mejor se adapte a vuestro peque y vuestro coche. Yo he comprado nuestras 3 sillas (2 Klippan Kiss II y una Besafe IZI Plus) en Pequeneques y he acudido también a Nordic Baby para buscar repuestos e informarme de otros modelos para cuando me toque el terrible cambio en poco tiempo, que el mayor superará el peso/altura de su SRI Besafe Izi Plus y no nos quedará más remedio que sentarlo en dirección a la marcha, después de casi 5 años , con un percentil 104 y absolutamente feliz, cómodo y seguro en su silla en contra de la marcha. Tanto Nordic Baby como Pequeneques son unas tienda donde venden seguridad, y donde cada vez que me acerco a verificar si las sillas siguen bien colocadas o tengo cualquier duda, me atienden con una sonrisa y las revisan/ajustan sin hacer click en su caja registradora. ( y no, no me llevo comisión por este párrafo. Es una muestra de gratitud a quienes se dedican al comercio de productos infantiles informados, con el claro objetivo de contribuir a la seguridad de nuestros hijos).
Podéis mirar vídeos muy ilustrativos sobre la diferencia de llevar los peques en dirección a favor y contra la marcha. Aquí os dejo una lista de reproducción de mi Canal de YouTube.
Y si ya sabéis todo ésto, lo que os pido es que divulguéis la información. Para que no haya Ni un peque más en peligro. Podéis sumaros en twitter y ayudar con vuestros RT.
Aquí os dejo el cartel de la Campaña para que lo descarguéis y os invito a compartir este post en vuestras redes sociales, así como fotos de vuestros peques en SRI ACM o los motivos por los que los lleváis así, acompañados del hashtag #niunpequemasenpeligro .
Aquí te dejo un post que seguro te interesa: La mejor silla de coche para tus peques.
Si crees que mi publicación puede ser útil a otras familias, recuerda compartirla a través de tus redes sociales y WhatsApp 💜.
¡Nos leemos!
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29 Comments
Hola, yo tengo una concord ultimax q sirve de recien nacido hasta los 4 años, ahora la usa la segunda q tiene casi 4 meses y a contramarcha, porsupuesto, mi duda es, sabes si esta silla puede usarse así hasta los 4 años? Mi hija mayor tiene casi 5 años y la llevo en una recaro d stas ya dl grupo 3, vamos lo q seria un elevador xro cn el respaldo y los laterales d seguridad xro q va cn el cinturón dl coche, esta a contramarcha no se puede usar, verdad? Y supongo q menos aun ya xq tiene casi 5 años. X cierto muchas gracias x el post, muy buena información y ojalá más padres se concienciaran sobre la importancia d viajar a contramarcha. Yo con la mayor no tenía ni idea y cuando pesaba más d 9kg q era lo q decían, la puse mirando hacia delante, sabiendo esto, cn la pekeña dsd luego no lo haré, xrp tendré q tnr claro si la silla q tngo sirve durante tanto tiempo, creo q sí xrp avr. Saludos!
Hola ! Creo que la Concord que tienes no vale para ir ACM , te sugiero que mires aquí http://acontramarcha.com/ donde vienen todos los modelos a contramarcha del mercado y también puedes hacer preguntas sobre la que tienes. Por otro lado,mas allá de la edad, lo importante para mantener al peque ACM es su tamaño. En la silla Besafe Izi Plus que tengo para mi mayor,puede ir ACM hasta 25 kgs. Él tiene 4 años y medio, percentil 104 y pesa 22 y aún va genial aunque sobre los 5 años tocará cambiarlo. Sin embargo, mi hijo menor que tiene percentil 25, seguro puede ir ACM hasta los 6 o 7 años en esa misma silla!
Me alegra saber que te ha servido leerme, y espero que te unas a la campaña compartiendo el Post o publicando en tus redes sociales el hashtag #niunpequemasenpeligro #acontramarcha para que lleguemos a la mayor cantidad de familia posible!
Feliz jueves!
Muchas gracias! Me informaré bien 🙂
Que encontréis la mejor forma para viajar felices y seguros!
Me ha ENCANTADO tu post. Totalmente de acuerdo contigo, ha sido un placer leerte, no lo podías haber escrito mejor. Mi enhorabuena y mi agradecimiento por sumarte con una información tan completa!
Muchas gracias a ti por haber puesto en marcha esta iniciativa fundamental para crear consciencia!
Feliz finde!
Tengo una cybex sirona esta es giratoria, mi bebé tiene 9 meses. Mi duda es cuando las piernas no le quepan…..y supongo que será antes de los 4 años…. que puedo hacer?
El tema de las piernas no es un problema, mis hijos van con las piernas cruzadas y tan a gusto, de hecho en viajes eso es muchísimo más cómodo que ir con las piernas colgando. Imagina cuando estás en una banqueta alta del bar, al final siempre buscas apoyo..Ellos van sentados de la misma forma que se sientan en el suelo a jugar, con piernas cruzadas 🙂
Según veo en la web de Cibex , puedes llevarlo en esa silla a contra marcha hasta los 18 kgs, así que tu límite es ese.
Si tienes más dudas, lo mejor es consultar con la tienda donde la has comprado, que seguramente pueden orientarte viendo silla y peque a la vez.
Para que tengas de referencia, aunque mis sillas son de otras marcas, mi hijo mayor es muy alto (ahora mide como 1,15 y pesa 22 kgs con 4 años y 3 meses) y va perfectamente ACM.
Feliz finde y gracias por pasar, leer y comentar!