Hace unos días recibimos nuestros primeros cuentos accesibles de Editorial Geu y estamos emocionados.
Estos libros tienen la particularidad de estar escritos y llevar pictogramas como apoyo visual, haciéndolos ideales para pre-lectores y para peques con alguna diversidad funcional (por ejemplo autismo) que requieran de este apoyo para poder seguir la historia, comprenderla e incluso contarla. Hace unos días os contaba sobre el PICTO organizador de la misma editorial, un calendario genial que cumple con estos mismos requisitos y del que estamos enamorados.
En nuestro caso la inclusión de pictogramas en los cuentos nos ha dado muchísimo juego tanto para mi hijo neurotípico como para el neurodiverso.
Los cuentos que hemos leído son La princesa aprende a hablar de Valeria Kiselova Savrasova y Buscando a Dory de Disney.
La princesa aprende a hablar
Este cuento acerca la magia de la enseñanza a una niña que no sabe hablar, identificando a los peques con TEA (Trastorno del Espectro Autista) u otras diversidades funcionales con alteración en el desarrollo del lenguaje con la princesa a la cual el hada ayuda.
En la historia, el “hada” es en realidad su madre, padre, logopeda o todos ellos juntos.
Es un cuento interesante para que se reconozcan y no se sientan solos o extraños ante esa situación que viven intentando comunicarse sin lograr conseguirlo, donde aprenderán que en los caminos con dificultades hay muchas “hadas” para que el niño sepa que nunca estará solo y que con esfuerzo y trabajo se pueden conseguir muchas cosas “mágicas”.
Buscando a Dori
Si habéis visto la película, saga de Buscando a Nemo, sabréis de qué va la historia. Bajo mi punto de vista, este cuento tiene 4 cosas magníficas:
1-La historia. Los que me leéis sabéis que me encantan los cuentos donde se visibilizan las diversidades y se naturalizan, porque creo que ello fomenta la empatía de quienes no viven dentro de esa diversidad, y a la vez genera un bienestar en quienes se ven reflejados en ella. Tanto Nemo como Dori son dos películas increíbles para ver con nuestros hijos y disfrutar de un contenido respetuoso con respecto a sus condiciones: Nemo con hemiparesia (como Mijo2012) y Dori con sus pérdidas de memoria a corto plazo, entre otros personajes también diversos y muy cercanos.
El cuento es la historia de la película, tal cual.
2-Los pictogramas. El apoyo visual para el relato de esta historia amena pero larga, resulta ideal para los peques, adaptando el cuento y haciéndolo accesible.
3-El formato. El cuento viene en gran formato, con impresiones muy coloridas y preciosas. El tamaño es ideal para que lo manipulen niños y niñas desde los 3 años, y para compartirlo leyéndolo en familia o grupo.
4-El pack! Esto sí que es absolutamente genial y diferenciador.
El cuento viene en una caja que incluye el libro y todos los pictogramas impresos en él en tarjetas individuales. Estas tarjetas nos han fascinado. Sirven para contar la historia, para armarla entre todos repartiendo las tarjetas, para hacer preguntas y respuestas.
De momento las hemos utilizado de varias formas y todas han sido divertidas!
Qué dicen los expertos
Mijo2014 con sus recién estrenados 3 añitos, ha tenido la posibilidad de leer por sus propios medios los cuentos, sintiéndose importante y a la vez autónomo, algo que le genera confianza en sí mismo y le permite ir a su rollo. Por qué digo eso? Porque desde que montamos nuestro Rincón de Lectura, siempre pasan parte del día allí relajados con sus libros pero el peque termina pidiéndome que le lea las historias porque él no sabe leer.
Mijo2012 acaba de cumplir 5 y hace dos años ha comenzado a leer, sin prisa pero sin pausa. Aunque no sea capaz de leer un cuento por sí solo, tiene una memoria tan increíble que puede repetir cada historia sin necesidad de leerla, una vez o dos que las haya oído. Así que con él lo más favorecedor es el poder asociar los pictos a las palabras para impulsar su aprendizaje, aparte de que ese apoyo visual le viene genial para comprender mejor el cuento.
Ambos coinciden en que el más divertido es el de Dori, sobretodo por lo que hemos jugado gracias a sus tarjetas y su gran colorido.
Ya veis, la crianza típica y atípica no es tan diferente cuando contamos con herramientas como éstas que fomentan la inclusión, entendiendo y aceptando la diversidad que existe en la niñez.
Yo he visto dos niños disfrutando de los mismos cuentos, aprovechando la adaptación con pictos cada uno para lo que le venía bien y olvidándonos todos durante esos ratos de lectura y juego que uno de ellos ha pasado por un ictus (vuelvo a recordaros que puede pasar a cualquier edad, incluso antes de nacer!) y tiene PCI y dificultades en el lenguaje pragmático.
Si queréis saber más sobre esta colección de cuentos, os dejo el enlace a la Editorial Geu, que según leo en su web fue creada con una clara vocación educativa y cultural, apostando siempre por la igualdad educativa, la equidad y la inclusión en el aula. Clic aquí para descubrir su catálogo de cuentos accesibles!
¿Conocíais estos cuentos? ¿Tenéis otros para recomendarme?
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¡Nos leemos!
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