Considero imprescindible en el ámbito sanitario: la actualización, el respeto y la empatía.
Hoy he leído una noticia sobre que la Consejería de Sanidad de Madrid quiere transmitir a sus profesionales un Plan de Humanización. La podéis ver aquí.
Madrid apuesta por humanizar la sanidad con un decálogo para profesionales con pautas de este tipo:
- Atender al paciente como él quiere ser tratado es otra de las máximas, pues » no es un número, una cama, un diagnóstico, ni un adjetivo». Y su familia debe ser tenida siempre en cuenta, ya que «son un gran alidado terapeútico», al tiempo que se debe escuchar lo que el paciente tiene que decir y asegurarse de que «te ha comprendido y resuelve sus dudas».
- Mira al paciente a los ojos, sé receptivo, dale la mano al entrar, al salir, sonríe, preséntate y sé amable. Tú has elegido la profesión pero él no ha elegido ser paciente.
Leo en Redacción Médica:
<<El documento, de 234 páginas y dividido en 16 apartados, define a los profesionales como “agentes de la humanización”. Según apunta el plan, “su actitud y sus conductas marcan la diferencia entre una asistencia humanizada y otra que no lo es”. Por ello, según destaca el texto, la Consejería tiene un objetivo: “Nos centraremos en potenciar las conductas humanizadas y trabajaremos por erradicar las conductas y actitudes deshumanizadas, donde se reduce a los individuos a cosas u objetos>>
Y yo me pregunto:
¿cómo estaremos de deshumanizados todos y todas, incluidos los profesionales del ámbito sanitario, para que a esta altura de la evolución necesitemos que nos digan por escrito que miremos a los ojos, que una persona es eso y no su etiqueta ni una cosa, que el entorno familiar es imprescindible?
Por un lado me alegra, siempre me quejo de esa apatía en sanidad y educación (me molesta en todos los ámbitos sociales, pero más en éstos). Os lo contaba aquí en mi pedido de ser considerados un todo y aquí al pensar en los padres y madres de peques con TEA, que en definitiva somos todos los que recibimos diagnósticos, sea cual sea.
La apatía en Sanidad es sufrida por los que criamos peques atípicos, y también por pacientes de todo tipo y sus familias, por las mujeres que en su proceso de embarazo y parto son infantilizadas o víctimas de inne-cesareas y otras barbaridades, los tutores al consultar con pediatras y otros profesionales del mundo sanitario relacionado con el puerperio y la niñez que estando desactualizados (o monetizados) desinforman y/o ridiculizan la lactancia…y la dilapidan.
Hay muchos casos que, lamentablemente, he conocido en primera persona. Y otros que he leido de bloggers que divulgan sus malas experiencias, o de gente de mi entorno…
No son casos aislados. Casi son la regla en lugar de la excepción.
Pero por otro me hace reflexionar sobre cómo vamos perdiendo la intuición, la tolerancia, la empatía natural: todo lo que somos y tenemos cuando niños y niñas…a medida que crecemos y nos «educan» y nos «civilizamos»…se pierde.
Espero poder mantener en mis hijos , a través de la forma y el contenido que elijo darles en su educación, las herramientas necesarias para apreciar la empatía y no perderla con los años.
Para que elijan la profesión que elijan, tengan la familia y los amigos que tengan, sean siempre respetuosos, amables, cercanos y empáticos. Como lo son hoy con sus 2 y 4 años.
Y espero también que este decálogo sirva para humanizar a quienes lo lean y lo necesiten en el ejercicio de su profesión y fuera de ella. Que la empatía la necesitamos todos los días, en todos lados, en toda la gente!
Qué opináis? Que os parece este decálogo para el sector de Sanidad?
Debería existir en otros sectores ?
Es un insulto a esos profesionales asumir que están deshumanizados y necesitan estas pautas?
Tengo muchísimo interés en conocer otros puntos de vista!! Por favor, comentarme los vuestros.
Nos leemos!
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