La mayoría de peques pueden pasar largos momentos jugando con arena en el parque o la playa. Es una actividad llena de beneficios que, durante la pandemia, se ha visto reducida por el confinamiento, cierre de espacios infantiles y riesgos ante la dificultad de mantener el distanciamiento.
Por ello, hoy te cuento algunas posibilidades para que tus hijos e hijas puedan volver a jugar con arena…¡sin tener que salir! Y de paso, enumero los múltiples beneficios que tiene esta actividad para peques típicos y atípicos.
¿Un arenero en casa? ¿Dónde conseguirlo?
Así como algunas familias creativas y manitas se las ingenian para crear espacios lúdicos en sus hogares, en mi caso he estado mirando opciones más fáciles para poder jugar con arena en nuestra terraza y me he topado con un arenero infantil de la empresa alemana Wickey.
Como soy una obsesa de la información, antes de decidirme por estos areneros he mirado quiénes los fabrican, con qué materiales y las opciones disponibles. Me ha gustado especialmente que sea una empresa familiar que lleva años dedicada a la fabricación de parques infantiles de calidad en madera y que haya medio millón de hogares con sus productos (¡sólo hay que mirar la cantidad de fotos que comparten sus clientes!).
Areneros infantiles: un trocito de playa en nuestro hogar.
Quizás estés pensando que tener un arenero en casa es complicado, ocupa mucho espacio o puede generar un caos de arena por todos lados. Pero los modelos que he estado viendo pueden instalarse en el jardín, terraza, balcón o incluso dentro de casa sin dificultad y gracias a los modelos con tapa, dejan la arena cubierta cuando no esté en uso.
Si cuentas con espacio exterior, como nosotros, seguro te encantará este modelo más grande y súper divertido.
En fin, en su web hay muchos tipos de areneros y te recomiendo que les eches un vistazo si crees que tener un poquito de playa todo el año va a ser interesante para tus peques.
Los beneficios de jugar con arena en peques típicos y atípicos.
Entre los múltiples beneficios de jugar con arena, me gustaría resaltar las áreas que se estimulan en nuestros hijos e hijas con o sin alguna diversidad funcional o discapacidad:
- Creatividad artística
Hacer y deshacer, crear castillos, muñecos, figuras, letras…La arena nos brinda tantas posibilidades creativas como queramos.
- Lenguaje y lecto escritura
Cada juego con arena incluye múltiples actividades, utensillos, juguetes y un largo etcétera que permitirá fomentar el aprendizaje de nuevo vocabulario mientras lo vamos nombrando.
Y como ya habrás imaginado, todas las personas que sabemos (o están aprendiendo a) leer y escribir, usamos de manera automática la arena para dejar mensajes, poner nuestros nombres, leer lo que han escrito los demás. Así como muchas familias utilizan bandejas con arena para que sus peques comiencen a escribir letras con el dedo o un palito, tener un arenero en casa nos acerca a la experiencia de la orilla donde nuestra escritura puede explayarse bastante más.
- Imaginación, juego simbólico y habilidades sociales.
Esconder dinosaurios en la arena y transformarlos en arqueólogos, imaginar que estamos en la playa o en el parque haciendo un picnic…son disparadores de actividades que fomentan la imaginación, el juego simbólico y potencia la posibilidad de trabajar las habilidades sociales con iguales.
Como madre de un niño dentro del espectro autista que se fascina con el tacto de la arena, tener un arenero en casa me parece un recurso interesante sumado a las posibilidades de que sea un gran reclamo para que otros niños y niñas vengan a pasar la tarde y compartan el juego como interés común, cooperativo y constructivo.
- Lógico-matemática y ciencia.
Llenamos y vaciamos diferentes recipientes, los comparamos, vemos sus capacidades. Jugar con arena permite el aprendizaje de medidas y de conceptos como mayor-menor. También podemos experimentar la transformación de la arena mezclándola con diferentes cantidades de agua.
- Estimulación sensorial
Caminar en la arena, pisarla, manipularla, incluso recostarse encima(sí, mis hijos son amantes de hacer la croqueta) da muchísima información sensorial, que puede servir especialmente para estimular extremidades afectadas como en el caso de la hemiparesia infantil o para conseguir la regulación en peques con diagnóstico de autismo (TEA).
- Motricidad fina y gruesa
Caminar, gatear, hacer equilibrio o dar saltos sobre la arena fomenta la psicomotricidad de niños y niñas. La manipulación de la arena, hacer pelotas, llenar, trasladar y vaciar cubos, el uso de palas, moldes y todo lo que vuestra imaginación quiera es una sumatoria de actividades geniales para trabajar la motricidad fina e incluso realizar terapias como la Bimanual o Restrictiva para peques con Parálisis Cerebral Infantil (PCI) o Parálisis Braquial Obstétrica (PBO).
- Contacto con la naturaleza
Jugar al aire libre y/o con materiales naturales no estructurados, permite unas posibilidades de aprendizaje espontáneo que la mayoría de juguetes actuales no deja desarrollar.
En fin, que yo lo tengo bastante claro y creo que en breve verás en mi cuenta de IG las fotos de mis peques disfrutando de un arenero.
¿Te lo planteas tú también?
¿Tienes ya un arenero infantil en casa? ¡Cuéntame!
¡Nos leemos!
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